La montura dobsoniana tiene forma de caja y, a menudo, se instala en el suelo sin trípode. Estas monturas son fiables, fáciles de instalar y de controlar. Los telescopios dobsonianos también son fáciles de transportar, lo que los hace excelentes para observar las estrellas en los suburbios. Las monturas dobsonianas son increíblemente resistentes y pueden funcionar con los reflectores newtonianos gigantes. Su diseño simple y su precio asequible hacen que los telescopios dobsonianos sean muy populares entre los astrónomos aficionados.